Animado tanto por la previsión buena de tiempo, como por el amigo Carlitos, también conocido como el RUBITO, quien durante muchos años fue uno de mis pupilos en las andanzas atléticas de tantos saltos y saltos, ahora es uno de los buenos amigos con los que comparto esta pasión por la escalada, y como últimamente el andaba con ganas de salir a blocar pues ale pallá que nos fuimos a LEDESMA.
Tampoco podíamos ir muy lejos pues el trabajaba por la tarde y como nos acompañaba mi preciosa francesita, sí eso, ADE, pero trankis que ella no trepó, fue con la única, sincera y sana intención de pasear por el campo y pasar junto a nosotros y mientras nos veía apretar los bloques e íbamos dejando nuestros datos y restos digitales en pegue tras pegue.
En estas fotos de arriba aparecemos trepando y bloqueando en bloques que sin ser algo extraordinario, ya nos hacían sudar y darlo todo para sacar los problemas que nos planteábamos, en más de uno NI NOS ATREVIMOS A METERNOS, éramos sólo dos, o sea uno trepa y UNO SOLO CUBRE así que... y aún así, encadenamos uno de ellos de unos 3 metros y pico sino cuatro que aúpa, cierto es que lo duro era la entrada pero cuando estabas bien arriba sólo pensabas, "COMO SER ROMPA UNO DE ESTOS GARBANCITOS...." y es que no eran precisamente de la armuña jejeje
Este, precisamente en este que está posando mi mujercita con esa SUPER-MOCHILA DELANTERA en la que lleva por ahora (y ya no por mucho tiempo...) a nuestro GEMELILLOS, como decía, en este bloque fue donde sacamos la línea de casi cuatro metrillos, pues aunque Ade es pequeñita, si que da para dos casi tres de su estatura hasta arriba, ahora que para bonita ESA BARRIGUITA Y MI FRANCESITA, jejeje ¿a que sí?
La verdad es que a pesar de ser sólo media jornada, nos dio para darlo todo y quedarnos exhaustos tras encontrar un precioso bloque con una travesía muy guapa, a la cual dimos unos cuantos pegues.
Aquí abajo os dejo las secuencias de fotografía de algunos de los pegues que le dimos tanto el Carlitos como yo a este precioso bloque.
Y ya cerca de la hora de comer, justo cuando ya llegó Ade de su paseo hasta el PUENTE MOCHO, terminamos de apretar o quizás es que las fuerzas ya no daban para más, así que decidimos dejarlo ahí y hasta la próxima para dedicarnos también a sentarnos y disfrutar de el campo estaba precioso y la tortilla de la mamá del rubio uuuummmm!!!! RIQUÍS
No hay comentarios:
Publicar un comentario